“Imagine all the people”. Ethos y pathos del Desarrollo Sostenible desde una crítica antropológica.

“Imagine all the people”. Ethos y pathos del Desarrollo Sostenible desde una crítica antropológica.

Ante la Agenda de Desarrollo presentada por Naciones Unidas y firmada por todos los estados miembros, no podemos dejar de preguntarnos si estamos ante un desafío real o si, en cambio, se trata de una utopía o la lírica de una bella canción. Desde la Antropología del Desarrollo, se intuía como un desenlace esperado e inevitable y, desde esa perspectiva y de forma crítica, analizaremos el “Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS)16: Paz, Justicia e Instituciones sólidas” partiendo de algunas discusiones antropológicas y reflexiones propias.

Ethos

Desde que Truman usara por primera vez el término en 1949, se comenzó a designar a los países que, ni eran tan ricos, ni tan modernos, como “subdesarrollados”. Bajo el paradigma de la modernización tras la Segunda Guerra Mundial, el crecimiento económico, la industrialización y el mercado eran la meta para coronarse como “país desarrollado” (y potencia hegemónica en muchos de los casos) y, según Bob Sutcliff (1995), la población debía acatar ese propósito.

En las siguientes décadas, los estudios dan cuenta del fracaso del paradigma y de que el crecimiento económico no es suficiente y que, de éste, han surgido problemáticas medioambientales graves derivadas, en gran medida, de la explotación de los recursos y el aumento de población (Martín-Cabello, 2013; Peemans, 1992). Para autores como Unceta (2009) la crítica al desarrollo a partir de los años 70, gira en torno de la prevalencia de la desigualdad y la pobreza, el deterioro medioambiental, la discriminación de género y la brecha de desigualdad con respecto a libertades y derechos humanos.

Es cerca de la década de los 90 cuando el desarrollo toma el matiz de “sostenible” en respuesta al objetivo de preservar el equilibrio ecológico (Unceta, 2009) y a la necesidad de un cambio en la actividad humana mediante el “desarrollo humano sostenible” que supondría un aumento del acceso a los recursos y su futura distribución para los grupos marginados (Sutcliffe, 1995).

Bajo estas premisas de equilibrio económico, bienestar social y sostenibilidad medioambiental la ONU crea, en 2015, La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible la cual propone 17 Objetivos con 169 metas que engloban las esferas económica, social y ambiental:


«Estamos resueltos a poner fin a la pobreza y el hambre en todo el mundo de aquí a 2030, a combatir las desigualdades dentro de los países y entre ellos, a construir sociedades pacíficas, justas e inclusivas, a proteger los derechos humanos y promover la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, y a garantizar una protección duradera del planeta y sus recursos naturales” (ONU, 2015).

Pathos

La tendencia histórica del desarrollo ha sido dinámica y adaptable a las decisiones de las naciones sobre qué nos tenemos que preocupar dado el momento. En términos de Arturo Escobar (2007) el desarrollo es definido“como una invención, una experiencia históricamente singular”, un “discurso” que parece que ha dejado su subjetividad al pasar a ser un documento consensuado y firmado.


Pero, aunque la ONU otorga un caracter humanitario, social y cultural a los ODS y su enfoque contemple los “nuevos comunes”, donde el principal actor es la persona en su cotidianidad, en sus relaciones sociales y no tanto en la lógica económica (Esteva, 2000), consideramos, que no deja de ser un desarrollo propuesto desde arriba, que no contempla realmente las realidades de las personas en su contexto:

La nueva agenda consiste en un plan de acción para las personas, el planeta, la prosperidad, la paz y el trabajo conjunto. Habrá de impulsar sociedades pacíficas, justas e inclusivas y exigirá la participación de todos los países, partes interesadas y demás individuos. Esta ambiciosa agenda se propone acabar con la pobreza de aquí a 2030 y promover una prosperidad económica compartida, el desarrollo social y la protección ambiental para todos los países” (ONU, 2015).


La agenda 2030, en lo que respecta a “Paz, Justicia e Instituciones sólidas”, se queda en intención, papel y fondos destinados de institución a institución en una época donde los conflictos armados y la crisis humanitaria va en aumento no podemos más que cuestionarnos, como antropólogos y ciudadanos, el papel y la relevancia de la ONU en lo que respecta a paz, seguridad y derechos internacionales (Ciancio, 2022).

Tenemos que afrontar la realidad de que, una declaración de este calibre firmada por Rusia y Corea del Norte (entre otros países “conflictivos”1) es pura retórica. Que la paz y la justicia debe comenzar desde abajo, desde la sociedad civil con una reducción de las relaciones asimétricas, mejorando las interacciones con otros grupos sociales y con el medio ambiente siempre teniendo en cuenta las diferentes perspectivas y dimensiones culturales. Hacer del Desarrollo Sostenible parte de nuestra cultura para así, se convierta en una forma natural de relacionarnos y, a partir de ahí, institucionalizarlo y fijar objetivos para que la PAZ deje de ser canción.


1 Con el adjetivo “conflictivo” refiero a los países que, actualmente están sancionados por la UE por sus programas nucleares como Corea del Norte o a la actual invasión de Ucrania por parte de Rusia, acciones que son la antítesis de la Agenda 2030 que suscribieron. Desgraciadamente, este adjetivo se puede ampliar a otros países miembros de la ONU.


Bibliografía

-Ciancio, Adrián (2022). ¿Se ha vuelto irrelevante la ONU? https://elpais.com/planeta-futuro/2022-03-12/se-ha-vuelto-irrelevante-la-onu.html#?prm=copy_link
-Escobar, A. (1995) El desarrollo sostenible: diálogo de discursos. Ecología Política 9, 7 – 25.
-Escobar, A. (2007). La invención del tercer mundo. Construcción y deconstrucción del desarrollo. Caracas, Venezuela
-Esteva, G. (2000). Desarrollo. En: Viola, Andreu. Antropología
-Martín-Cabello, A. (2013). Sobre los orígenes del proceso de globalización. Methaodos. Revista de Ciencias Sociales, 1(1), 7-20. http://dx.doi.org/10.17502/m.rcs.v1i1.22
-Sutcliffe, B. (1995). Desarrollo frente a ecología. Ecología Política, 9.
-Unceta, K. (2009). Desarrollo, subdesarrollo, maldesarrollo y postdesarrollo. Una mirada transdisciplinar sobre el debate y sus implicaciones. Carta Latinoamericana, (7), 1-34.
https://www.unwomen.org/es/what-we-do/2030-agenda-for-sustainable-development
https://www.un.org/es/about-us
https://www.mdsocialesa2030.gob.es/agenda2030/gobernanza.htm
https://estrategia2030.es/objetivo-16-paz-justicia-e-instituciones-solidas-2/

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